Si tienes un perro (o más) debes estar más que acostumbrado a viajar con tu mascota en coche. Pero, ¿ya lo llevas adecuadamente? ¿Ya conoces la legislación marcada por la DGT en estos casos?

Para empezar, debemos mirar que desde cachorros nuestros perros se acostumbren a ir en coche ya que será una rutina bastante habitual, dependiendo de su estilo de vida. Lo ideal es que no forzarles a subir al coche para que no tengan miedo a entrar. Es mejor dejar que lo hagan solos y, en todo caso, ayudarle poniéndole algún premio.

Haz de su lugar de viaje un espacio cómodo y agradable para que lo vincule a una experiencia positiva, ¡así conseguirás que tu perro tenga ganas de viajar. Y no le des de comer antes de subir al coche! Te ahorrarás tener que limpiar vómitos.

Cómo viajar con tu mascota

Para llevarlos correctamente y que no nos multen debes tener en cuenta los siguientes requerimientos:

El punto más importante de la legislación vigente es que nunca se puede llevar al perro libre dentro del vehículo ya que puede provocar distracciones, daños a los ocupantes e incluso interferir en la conducción. Y, aunque no se especifica exactamente cómo se debe transportar claramente un perro en coche sí que se mencionan unas características básicas que deben tenerse en cuenta:

– Importante disponer siempre de la cartilla sanitaria, una placa censal del ayuntamiento y el chip identificativo. Y, si nuestro perro es considerado como potencialmente peligroso, también debe disponer de un seguro de responsabilidad civil y la correspondiente licencia.

– Malla separadora del vehículo: Es uno de los sistemas más populares pero no es el más seguro puesto que, en caso de accidente, el perro podría acceder a los asientos delanteros. No cumple con la normativa

– Cinturón de viaje para mascotas: Es un sistema más seguro que el anterior y debe ir siempre sujeto a un arnés. Nunca se puede utilizar el collar, ya que en un impacto el perro podría ahogarse. Cumple con la normativa.

– Arnés de doble sujeción: Este arnés es mucho más seguro que el anteriormente mencionado. Dispone de un espacio para que atemos directamente al perro empleando el cinturón de seguridad del coche. Como pega debemos destacar que limita los movimientos del perro pudiendo provocarle estrés durante el viaje. Cumple con la normativa.

– Transportín plegable: Los podemos colocar en los asientos traseros o en la zona inferior (dependiendo de las dimensiones del perro). Es ideal para perros pequeños. Si no está bien sujeto puede provocar lesiones al perro. Cumple con la normativa.

– Transportín rígido: es un tipo de transportín más seguro que el anterior. En caso de impacto el perro recibiría el menor daño posible y no afectaría a los conductores. Se puede colocar en los asientos traseros, en la zona inferior o en el maletero abierto. Ahora también podemos encontrar en el mercado los transportines de aluminio, los más seguros del mercado. Cumple con la normativa.

– Rejas divisorias: Las rejas para el maletero deben ser específicas para cada modelo de coche, no de tipo universal, porque quizá no aguantarían correctamente el impacto en caso de colisión. Cumple con la normativa.

Pequeños gestos como estos, mejoran cada día nuestra seguridad vial y la de los demás. Un tema en el que desde PracticaVial insistimos a través de nuestros contenidos. Si tienes dudas en cuanto a cualquier aspecto relacionado con la conducción, ya sea de la teoría o de la práctica, o si crees que deberías repasar algunos conocimientos sobre el carnet de conducir con el fin de mejorar tu seguridad vial, ¡no dudes en echar un vistazo a todo lo que tenemos listo para ti!