Poner combustible en el coche es una tarea tan mecánica que, si vamos muy despistados o acostumbramos a conducir diferentes tipos de coche a menudo, puede llevarnos a cometer un grave error, fatal para el motor de nuestro coche y para nuestro bolsillo.

Las gasolineras generalmente indican correctamente el tipo de combustible prácticamente en todo momento:

– En gasolineras tradicionales, en las que se pone gasolina antes de pagar, la máquina siempre avisa con un mensaje sonoro al coger la manguera indicando qué tipo de combustible estás a punto de poner.

– En gasolineras de pago previo o autoservicio te van informando durante el proceso de pago del tipo de combustible que estás pagando por poner.

Pero a pesar de todos estos avisos puede ocurrir que un día cometas el error de equivocarte y entonces… ¿Qué debes hacer???!!!

Lo cierto es que este error es más habitual de lo que pensamos. Lo más importante en este caso es darse cuenta lo antes posible, a ser posible antes del encendido del vehículo. Si enciendes el vehículo con el combustible equivocado, éste se distribuirá por el sistema incrementando los riesgos de dañar el motor.

Qué hacer si te has equivocado de combustible

Si te has dado cuenta antes llama a la grúa o a un servicio de asistencia para que se lleven el coche al taller y efectúen el vaciado y limpieza de los depósitos. Ésta es la mejor manera de que nuestro coche no sufra males mayores.

Pese a que lo óptimo es darse cuenta antes de encender el vehículo, lamentablemente, lo habitual es darse cuenta después de haber recorrido varios kilómetros, justo cuando empiezas a notar cosas extrañas. Si ese es el caso, vas tarde.

Si ponemos gasóleo en un coche de gasolina lo que hay que hacer es avisar a una grúa y llevar el coche al taller para que un profesional vacíe y limpie el depósito. ¡No lo intentes hacer tú! Ésta es una operación que conlleva riesgos y se requieren medidas de seguridad.

Si ponemos gasolina en un coche de gasoil el error todavía puede salirte más caro, sobre todo si hemos llenado el depósito. El motor empezará a hacer espasmos bruscos y podría llegar a pararse. Seguramente el filtro o la bomba de inyección se han visto afectados y puede darse el caso de que sea necesario sustituirlos. Incluso puede afectar a uno o varios inyectores, con lo que la broma puede salirte cara.

Así pues, por favor, pon mucha atención a la hora de repostar tu vehículo, tu coche y tu bolsillo ¡te lo agradecerán!

Ver: Echar gasolina: manual para novatos